miércoles, 12 de noviembre de 2008

NACHO VIDAL


Mira que había calles. Mira que había tiendas. Pues fijarse con el tocho de mortadela con el que fuimos a encontrarnos la primera noche. Paseábamos en dirección al centro y nos encontramos con una pieza que serviría para ponerle bocadillos a todo Cerro Muriano.

1 comentario:

aiNOha dijo...

Maaaadre mia, con una loncha de esas hay pa un bocadillo por lo menos no? jaja
Qué rica está la mortadela X)

Besitos